Más de 100 millones de americanos se encuentran en estos momentos bajo algún tipo de advertencia o alerta debido a la masa de aire, extremadamente fría y procedente del Ártico, que está cruzando gran parte de los Estados Unidos.

 

 

Se esperan condiciones invernales extremas desde el Noroeste del Pacífico hasta el sur de las Planicies, valle del Mississippi hasta el valle de Ohio, y desde el medio Atlántico hasta el Noreste, durante lo que resta del fin de semana y al menos el primer día de la próxima semana.

 

El sábado, 13 de febrero, las temperaturas permanecieron entre 11 y 22ºC (de 20 º a 40ºF) por debajo de lo normal en el centro del país.

 

Las nevadas previstas son copiosas, al mismo tiempo que se espera una importante acumulación de nieve. Y lo peor es que el gélido aire del Ártico hace que la sensación térmica sea de más frío.

 

La previsión es que cada día, se superen cerca de 300 registros históricos de temperaturas mínimas, desde Canadá hasta Texas.

 

Ante esta perspectiva climática, no cabe duda que circular en estas condiciones y bajo estas temperaturas extremadamente bajas, sea muy peligroso.

 

Por desgracia, las temperaturas tan bajas han provocado que algunas plantas de procesamiento y de conducción de gas natural hayan tenido que cerrar, interrumpiendo así el servicio de combustible para las calefacciones.

 

No solo la demanda de electricidad, gas, propano y aceite de calefactores ha aumentado considerablemente, sino también los precios. Pero, para colmo, el líquido en las tuberías se ha congelado y en algunas zonas, las tuberías no funcionan.

 

Además, se han registrado apagones eléctricos que han dejado a miles de residentes sin suministro eléctrico debido a la caída de ramas de árboles y de cableado eléctrico por el peso de la nieve y/o del hielo.

 

Por supuesto que se trata de un evento climático completamente inusual. Nunca se habían registrado temperaturas tan bajas y en una región tan amplia. Por lo que más que probablemente se convertirá en un evento histórico para el recuerdo, pero mientras se supera, muchos residentes están luchando para sobrevivirlo.

 

El 11 de febrero, se produjo un accidente múltiple cerca de Fort Worth en el que se vieron implicados unos 130 vehículos. Las personas no están acostumbradas a circular bajo unas condiciones climáticas tan extremadamente frías. El resultado del accidente fueron seis muertos y docenas de heridos.

 

El gobernador de Texas ha pedido a los residentes que eviten salir a la carretera y que conserven toda la energía eléctrica que puedan, ya que los próximos días serán extremadamente difíciles. El viernes declaraba el estado de emergencia y afirmaba que iba a pedir la Declaración Federal de Emergencia para todo el estado.

 

El Servicio Nacional de Emergencia ha informado que el transporte y la circulación en Texas será muy difícil, sino imposible a última hora del domingo al lunes.

 

Se prevén nevadas muy intensas y temperaturas muy bajas.

 

Gran parte de Texas afronta temperaturas mínimas históricas que persistirán durante días.

 

Pedimos a todos los que residen en las zonas afectadas, que extremen las precauciones y que no se expongan al exterior. Evitar desplazamientos innecesarios resulta crucial.

Fotografía. Crédito: NWS

 

 

 

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